El coordinador regional de Izquierda Unida-Verdes, José Luis Álvarez Castellanos, ha calificado como "injustificable" la subida del 25% en la tarifa del suministro de agua potable en La Unión. Durante el pleno municipal celebrado esta mañana, en el que el alcalde Joaquín Zapata se vio obligado a retirar la votación al no contar con el apoyo suficiente, al retirarse el de sus socios de gobierno de Vox, Álvarez-Castellanos denunció que el alcalde ha vuelto a mentir en un intento de justificar una medida profundamente impopular.
A las puertas del consistorio municipal, Álvarez-Castellanos acusó al gobierno local de emitir un comunicado lleno de falsedades para defender el incremento de la tarifa. "El alcalde miente cuando dice que el aumento se debe a la subida de precios por parte de la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT). La realidad es que la MCT no ha incrementado sus tarifas desde 2015 y no tiene intención de hacerlo en el futuro inmediato", afirmó.
Álvarez-Castellanos también desmintió la afirmación del alcalde en el pleno de esta mañana, en la que intentó justificar el incremento apelando al aumento de los costes energéticos. "No subieron la tarifa en 2021 o 2022, cuando los precios de la energía alcanzaron niveles exorbitantes y la inflación estaba fuera de control, pero ahora pretenden usar esta excusa para cargar este aumento sobre las espaldas de los vecinos", criticó.
El coordinador regional de Izquierda Unida-Verdes subrayó que las justificaciones del alcalde en relación con la sequía también son engañosas. "El alcalde miente nuevamente cuando dice que la sequía ha encarecido el agua. En realidad, la MCT ha dispuesto en 2023 del mayor volumen de agua desde 2008, con 207 Hm3, gracias a un sistema de desalación que ya aporta el 40% del agua y que ha proporcionado estabilidad al suministro", explicó.
Según el portavoz regional, la verdadera razón detrás de la subida del 25% en la tarifa es el contrato que vincula al Ayuntamiento con la empresa concesionaria, ACCIONA, la cual gestiona el servicio desde la privatización de 2012. "Desde entonces, la tarifa ha aumentado un 212%, perjudicando gravemente a los vecinos. Antes de la privatización, pagaban 11,25 euros por 15m3 de agua; tras la privatización, la tarifa subió a 29,14 euros. Con esta nueva subida, se verán obligados a pagar 38,22 euros por el mismo consumo", denunció.
Álvarez-Castellanos concluyó exigiendo al gobierno municipal que retire definitivamente esta medida, tachándola de "profundamente injusta y basada en mentiras", y advirtió que seguirán luchando para proteger los intereses de las familias trabajadoras de La Unión.