Tras el pregón de Fernando Sánchez Dragó en la segunda noche festivalera de La Unión (Murcia), la cuadragésima novena edición del Cante de las Minas que se celebra del 5 al 15 de agosto, inicia con fuerza su apuesta anual para la celebración y el gozo del arte jondo más puro. Una pureza que se conserva intacta en los concursos. Los protagonistas de las Galas de lujo son Niña Pastori, Carlos Piñana, Arcángel, Guillermo Cano, Mariana Cornejo, Capullo de Jerez, Rafael Amargo, Argentina y Vicente Amigo. Ellos precederán a las actuaciones de una treintena de concursantes elegidos de entre más de un centenar que se presentó a las pruebas selectivas en los meses anteriores.
Aquí, en los cuatro concursos: cante, guitarra, baile e instrumentistas, radica la esencia y la razón de ser de este evento flamenco que cumplirá cincuenta años la próxima convocatoria de 2010. Una nutrida Agenda Cultural plena de conferencias y exposiciones, así como de actuaciones al aire libre en los populares trasnoches, junto a la escalinata de la Catedral del Cante, configuran un espacio mágico difícilmente comparable.
LA UNIÓN, UNA APUESTA VERANIEGA POR LA CULTURA CON MAYÚSCULAS.
Un Festival atípico el de La Unión, al amparo de la Sierra Minera, de sus minas visitables, de su arqueología extractiva y de un “duende flamenco-minero” que se pasea airoso por las calles de una ciudad que hace tan sólo cien años era como un pueblo del oeste americano, o que se para en una tasca y entona un cante por “mineras” aliviado con vino tinto.
Ciudad de minas y mineros que hoy, ya en otros menesteres económicos, sigue conservando todo su esplendor modernista y un respeto profundo y religioso al enorme caudal cultural heredado de sus mayores, a los que también homenajea en estas fechas.
El Festival Internacional del Cante de las Minas es, sin duda, una apuesta veraniega distinta que asombra, sobre todo, a los puristas del arte flamenco pero que, guste o no guste el cante, no deja indiferente a nadie.